¡A BUENAS HORAS, "MANGAS VERDES"!

Ahora se descuelga el amigo Agca con lo de la "Conspiración Vaticana", como si no supiésemos la mayoría que aquello es un nido de víboras, donde con verdadera "caridad cristiana" se pisotean unos a otros intentando alcanzar los puestos más altos para, desde allí, gobernar el mundo, como lo han hecho siempre. No hay nada más que leer cualquier Historia del Papado para saber cómo estaba y está "el patio". Además, ¿tanto temía por su vida cuando estaba en la cárcel para no declararlo antes?

¿Alguien se acuerda del "oportuno" y repentino fallecimiento de Juan Pablo I? Yo sí, y puedo decir que cuando estuve en Roma el guía turístico nos preguntó, en "petit comité", a un grupito de españoles si "aquí se había comentado el suceso"; cuando yo le dije que algunos rumores habían circulado, respondió: "Si en España, que está lejos, hubo rumores, aquí, en Roma, hubo voces". No pudo ser más extraña la muerte de un hombre que poco antes había pasado un reconocimiento médico y estaba sano, dentro de lo que es la edad; y ¡qué casualidad!, cuando empezó a investigar las finanzas del Vaticano para informarse de cómo marchaba todo.

Quien quiera formarse como espía o diplomático, no tiene nada más que ir al Vaticano, que allí les dan "sopas con onda" a la CIA, el KGB, el  FBI, el MOSAD... ¡No son nadie propiciando caídas y subidas de gobernantes, golpes de estado, justificando lo injustificable, moviendo la silla del oponente mientras se arreglan la capa púrpura para que no tenga ni una arruga...! Que se lo pregunten a Polonia, Alemania, Rusia... Ahora lo están intentando en Cuba con el pretexto de los "disidentes" y aprovechando que los Estados Unidos mantienen el bloqueo para que continúe la miseria y el descontento. ¡Lo que no consiga la Iglesia, no lo consigue ni Dios Padre!

No se piensen por estas palabras que soy filocomunista; aparte de que la política me ha demostrado que es un inmundo lodazal, donde algunos se encharcan para conseguir medrar, los regímenes del ¡ordeno y mando!, tanto de derechas como de izquierdas, me producen verdadera repulsión y náuseas.

Esperemos que, si como está previsto, gana las elecciones el PP, nuestra débil y vigilada Democracia no se vea afectada por el virus de la "nostalgia nazional-católica (sí, con Z) y dictatorial" porque si es así, ¡apaga y vámonos!

                                         SCARPIA